Huermur ha presentado una denuncia ante el Seprona de la Guardia Civil tras descubrir pintadas y desperfectos en una de las torres medievales BIC ubicadas en las proximidades del Santuario de la Fuensanta en Murcia.
La entidad conservacionista denuncia el pésimo estado de conservación de las dos torres medievales ubicadas en el paraje del Santuario de la Fuensanta de Murcia. Unas edificaciones islámicas datadas aproximadamente en el siglo XII, casi desconocidas.
Huermur critica la falta de interés de la Consejería de Cultura para su adecuado mantenimiento, protección y establecimiento de su protección como Bien de Interés Cultural BIC, que lleva en un cajón desde 2018.
La Asociación para la Conservación del Patrimonio de la Huerta de Murcia (Huermur) ha presentado una denuncia en el Seprona de la Guardia Civil por la aparición de pintadas y actos vandálicos sobre una de las torres medievales de la Fuensanta en Murcia, ya que este inmueble ostenta la categoría de Monumento Nacional desde 1949, y por tanto es un Bien de Interés Cultural BIC, por lo que estas pintadas podrían suponer un presunto delito contra el patrimonio histórico.
Huermur viene denunciando desde hace años el pésimo estado de conservación de las dos torres medievales ubicadas en el paraje del Santuario de la Fuensanta de Murcia. Unas edificaciones islámicas datadas aproximadamente en el siglo XII, que poseen un carácter defensivo al estar construidas con sólidos muros de tapial de argamasa, y que se encuentran ubicadas muy cerca del complejo religioso. Pero que para muchos visitantes han pasado casi inadvertidas durante años.
La torre donde se han detectado las pintadas y actos vandálicos se encuentra junto al convento de las carmelitas y domina los accesos y subidas al santuario, así como gran parte del valle y de la huerta, ubicándose a sus pies la singular Casa del Labrador del siglo XVIII recientemente derribada.
Huermur critica la falta de interés de la Consejería de Cultura para el adecuado mantenimiento, protección y conservación de este bien. En 2018 la entidad conservacionista solicitó el establecimiento del debido entorno de protección para este patrimonio, puesto que según la disposición genérica de 1949 que protege todos los castillos y estructuras defensivas de España, así como la Ley de Patrimonio Cultural vigente, se le otorga a estas edificaciones medievales de forma general la condición de Bien de Interés Cultural BIC, y por lo tanto, deben contar con un entorno de protección cultural del mismo rango y una declaración expresa actualizada a la normativa vigente. A día de hoy la Consejería no ha dictado resolución expresa sobre esta solicitud de protección BIC cursada en 2018, por lo que Huermur ha instado igualmente a que se proceda a su resolución inmediata y sin más dilaciones.
La entidad conservacionista subraya que “la degradación de este patrimonio cada vez es más acentuada, por lo que hacen falta medidas inmediatas”, así como reprocha que “las denuncias presentadas hasta ahora parece que no han servido prácticamente para nada por la ineptitud de los responsables de la Dirección General de Patrimonio Cultural de la consejería”, señalan.
Por último, el presidente de Huermur, Sergio Pacheco, ha añadido que: “Esperamos que la Consejería de Cultura haga su trabajo y vele por la efectiva protección de este patrimonio histórico y cultural de nuestra tierra. No es de recibo, ni moralmente aceptable, que esta parte de nuestra historia esté así de abandonada y la administración no mueva un solo dedo”.