Huermur solicitó en mayo de 2019 la protección BIC con la categoría de Sitio Histórico de este lugar plagado de vestigios culturales, enclavado en pleno parque regional de El Valle y Carrascoy, y que abarca una superficie de más de 14 hectáreas.
La entidad conservacionista se congratula de esta nueva incoación, ya que supone un aumento muy significativo del catálogo de bienes históricos y culturales de la comarca de la huerta de Murcia que ahora están protegidos al amparo de la Ley de Patrimonio Cultural.
Se ha conseguido igualmente la protección como bien inmaterial de la Romería de la Bendición de la Simiente del Gusano de Seda, una tradición que data del siglo XIX y que está fuertemente ligada a este sitio histórico BIC y a la huerta de Murcia.
Huermur remarca la gran importancia patrimonial que representa este enclave, al poseer una gran cantidad de inmuebles históricos, patrimonio arqueológico y natural, bienes muebles e inmateriales.
La Asociación para la Conservación de la Huerta y el Patrimonio de Murcia (Huermur) ha conseguido que la Consejería de Cultura incoe como Bien de Interés Cultural BIC con la categoría de sitio histórico, el enclave de Santa Catalina del Monte en las pedanías murcianas de La Alberca y Santo Ángel. Una petición que fue cursada en mayo de 2019 por Huermur ante la Dirección General de Bienes Culturales vistos los altos valores históricos y patrimoniales que atesora este lugar, y que ahora se ha visto materializada en esta reciente incoación BIC.
Esta incoación recoge la protección legal, al amparo de la Ley 4/2007 de Patrimonio Cultural de la Región de Murcia, de numerosos elementos del legado cultural de Murcia y su huerta tanto de carácter material como inmaterial, y entre los que destacan:
.-El castillo de la Luz. Una fortaleza que fue construida en los primeros siglos de la dominación musulmana, y en cuyo cerro se desarrolla un poblado de amplia cronología que abarca desde la prehistoria hasta época medieval.
.-El Palacio del Obispo y Huerto Monacal de Santa Catalina del Monte. Antiguo Palacio de Verano del Obispo de la Diócesis de Cartagena, mandado construir por el Obispo D. Victoriano López Gonzalo entre 1789 y 1805. En 1441 D. Juan Mercader creaba el núcleo donde habría de surgir el monasterio franciscano. El primitivo convento fue tutelado por el Rey de Castilla D. Juan II, dando carta de naturaleza a su fundación el Papa Eugenio IV en 1443.
.-La Ermita de San Antonio el Pobre. Situada en la orilla de una rambla y en un paraje especial, con indudables valores paisajísticos. Se trata de un pequeño conjunto arquitectónico integrado por la iglesia, los restos de habitación del ermitaño y una cueva. Fue construida en el siglo XVIII.
.-El yacimiento arqueológico del poblado de Santa Catalina del Monte. En cuyas excavaciones se ha documentado una amplia secuencia cultural del yacimiento que abarca restos de época Calcolítica, Campaniforme, Edad del Bronce, época Argárica, Bronce Tardío y Final, Hierro I, Hierro II, Cultura Ibérica, Romana y Medieval.
.-La Romería de la Bendición de la Simiente del Gusano de Seda. Una tradición datada en el siglo XIX cuando por aquellos años los huertanos ansiaban la llegada de los primeros días de marzo, para recoger la simiente que tenían guardada en su barraca al objeto de poder bendecirla y conseguir una gran cosecha en la campaña que comenzaba.
Se añaden además numerosos bienes muebles catalogados en el Palacio del Obispo y Convento de Santa Catalina, la catalogación de un complejo hidráulico subterráneo en la zona, y la protección de un lugar de interés geológico LIG, conocido como el talud de Santo Ángel.
Huermur remarca la gran importancia patrimonial que representa este enclave único, que abarca una superficie de más de 14 hectáreas de espacios de monte en pleno parque regional de El Valle y Carrascoy, y que pasan ahora a estar protegidas al poseer una gran cantidad de inmuebles históricos, patrimonio arqueológico y natural, bienes muebles e inmateriales.
Esta solicitud BIC se enmarca, junto a otras tantas, dentro del ‘Plan PatrimurSOS’ de Huermur sobre la protección y salvaguarda del legado cultural de Murcia y su huerta. Un plan que obtuvo el sello del Año Europeo del Patrimonio Cultural 2018.
El colectivo conservacionista espera ahora que con esta incoación, que otorga de forma provisional la protección de BIC al sitio histórico hasta que se resuelva definitivamente el expediente de protección por Cultura, tanto el Ayuntamiento de Murcia como sus responsables apoyen la iniciativa para que se proteja de forma definitiva y diligente este espacio cultural y natural de todos los murcianos.